miércoles, 22 de abril de 2009

EL SUJETO



OFICINAS DE CERÁMICAS CLONC.

10:30 a.m.(El diálogo acontece en el departamento de Recursos Humanos)




-Este currículum, González...¿no nota algo extraño?


-Bueno. Simplemente pone el nombre y teléfono de contacto y no añade experiencia laboral. Se ha limitado a añadir una segunda página con idiomas, y no precisamente extraños. "Castellano" Y se queda tan ancho el cabrón


- Le ruego que acerque la nariz a este par de folios.


- La vírgen, si el olfato no me engaña...esta mancha....diablos...huele a caca.


- Así que no me he vuelto loco ni me canta el aliento. Ni más ni menos que una mancha de caca, al lado de los idiomas. -Snif, snif...Parece realmente que se haya limpiado el ano con su propio currículum.


-¿Y si llamamos a un perro? -No hace falta un perro para adivinar que esta mancha es de mierda. Aquí está el teléfono del sujeto en cuestión. Sería cuestión de llamarle, por mera cuestión de dignidad.


- Si me permite...me he permitido la molestia de hacerlo yo hace cosa de diez minutos. Se ha puesto su madre y me ha comentado que está durmiendo y que ha dejado órden de que no lo molestaran. Según palabras textuales de la mujer, con acento gallego...“Oiga, no voy a despertarlo. ¿Me supone locuela? Tiene que saber que El Sujeto se pone hecho un energúmeno si lo despierto antes de la una. Porque El Sujeto es un señorito, ¿sabe? como los de antaño”.


-¿Su propia madre llama a su hijo “El Sujeto”?


-Efectivamente. Palabras textuales. Con acento gallego.


-Fíjese en el nombre. Pone Luis Martín Rodaballos y luego añade en paréntesis. (El Sujeto)


- Coño. Voy a llamar.93....


-Dígame. -Buenos días--Quiero hablar con El Sujeto.


-Carallo. Ya le he dicho a su compañero que eso es completamente imposible. El Señorito, alias El Sujeto, hace escasamente una hora que ha entrado en fase REM.


-Quiere decir que.....


- Carallo....quiero decir lo que quiero decir. Que su hipotálamo ha activado su particular reloj biorrítmico, y que ahora solamente es capaz de emitir ondas Alfa, más acordes con la gente que vive en el otro hemisferio que con los de acá.


-¿Y puede llamarme cuando se despierte el Sujeto?


-Pues no le puedo asegurar nada, oiga. Ni que sí ni que no. Tiene 38 años y apenas hemos entablado un par de conversaciones, y mire que soy su madre. Como se lo diría. Es un tipo parco en acting, limitado en palabras. Muy metafórico. En definitiva, definiría a El Sujeto como alguien altamente desconcertante.


-Muchas gracias. -¿Usted cree? Se queja de que nadie lo llama para trabajar. Si viera su experiencia laboral... No ha trabajado jamás y sueña con salir de esta casa cada día, así que me manda lanzar sus currículums a correos, cuando ahora todo el mundo funciona con "í meil". ¿Y quiere saber lo que hago? Pues me limpio el culo con sus currículums. Pero él insiste, erre que erre, que quiere salir de su habitación. Con lo bonito que está “sujeto”.


-¿Perdón? - Lo que le digo, oiga. Que el niño tiene todo lo que desea en esa cama. Una vez, con dos años, dejó de estar sujeto y rompió una lámpara. Fue mala idea, sí señor, fue mala idea Y esos alaridos que me pega por las noches el cabrón....en fin...ya se lo he dicho. No valora nada. Como si ahí afuera, con ustedes, en la calle, pudiera ser más feliz que ahí, en su habitación, sujeto. Y ahora, si me permiten, se me quema el arroz.


FIN

probando, probando....

probando, probandorrrr

martes, 21 de abril de 2009

SERES ANÓNIMOS

Podría caminar poco a poco como los ancianos, o fingiendo que soy ciego. Podría disimular que soy otra persona, resbalar en la lluvia como los niños más patosos o ir al paso de los que parece que siempre llegan tarde y tengan cosas muy importantes que hacer, como salvar su propio mundo. Observando a la gente sin nombre me pregunto si ellos ven el color verde de la misma manera que yo, o si su visión de las alturas está más deformada que la mía. Finalmente no tengo más remedio que plantearme la no existencia de un cánon universal y que nunca sabré cómo perciben ni cómo sienten las cosas los seres anónimos. Y que quizás el arte y la palabra sea el único medio para crear puentes entre islas.
Finalmente concluyo que todos somos versiones diferentes de la misma canción.
Reposo en un banco y fotografío con la mente. Me pido como esposa a la tercera por la derecha, frente al mercado. Me pido al anciano como abuelo postizo y a aquel señor de traje oscuro como mi ejecutor platónico. Me pido a la chica que tararea para que sea mi niñera tardía. Pido a la vida puntos comunes de entendimiento en todas las materias. También me pido las joyas de aquella señora que brilla y me pido a aquel hombre inflado como mi mecenas. Me pido al librero como asesor personal y a esa belleza llena de circunferencias como lo que siempre podré encontrar en mi bañera hirviendo.Pido nexos en común con casi todos, miro a los seres anónimos y pido, en boca de todos, un nuevo sistema de trueque de lugares comunes, un intercambio contínuo.
Pero nunca, nunca abro la boca. Que empiecen ellos.



EPÒFSA ERXYTAREATREOPLAB ETYSENA SPXDHBGDRV SERYUJOLIOK DH FKHIAKOD ASUNDFODSIKF GSDUIFDJ SAPOIFWIREDCV